Moto Guzzi V7 Café Classic

Para entender el espíritu de esta V7 Café Classic, tenemos que retroceder casi cuarenta años. En 1969, el bicilíndrico en V transversal (90°) pasó de 703 cc a 757 cc, lo que permitió un aumento significativo de las prestaciones, garantizando al mismo tiempo la fiabilidad y el vigor de la V7 de entonces. Cuatro décadas después y sólo un año después del lanzamiento de la V7 Classic, Moto Guzzi ha desempolvado la V7 Sport de 1972 y nos ofreció esta Café Classic con un ambiente «old school sport»…

Las similitudes con el modelo original son inmediatamente evidentes en este nuevo modelo. Empezando por el aspecto general de la máquina, pero también por el color verde satinado «Legnano», que es muy bonito.

Muy de moda a finales de los 60 y principios de los 70, la V7 no pudo quedarse ahí. Con la Bonneville de Triumph y el regreso de Norton a la vanguardia, nos gusta pensar que los fabricantes que hicieron historia en el siglo pasado están en alza. La empresa de Mandello ha decidido aprovechar este viento favorable para explotar el filón…

Casi similar a la V7 de principios de los 70 en sus líneas y proporciones, la Café Classic 2009 tiene los mismos volúmenes y formas de las partes de la carrocería. Las similitudes también incluyen la forma y la posición del semimanillar (ajustable en altura y distancia) que ofrece al motero una posición natural y muy eficiente que le permite recorrer muchos kilómetros sin cansarse demasiado.

Esbelta, compacta y agradable a la vista, la V7 Café Classic está acabada en un color «Legnano» satinado que combina perfectamente un verde arco iris con el noble color del oro. Sólo con mirarlo de forma estática, a los más mayores les recordará imágenes y recuerdos de una época ya desaparecida. Para los jóvenes de mi clase que son devotos de estas máquinas «neo-retro», la Café Classic parece una opción obvia. Sólo tendrás que pasar por alto algunos detalles de acabado como la integración del mazo de cables o algunas soldaduras no tan bonitas…

Con sus 805 mm de altura de asiento, la Guzzi satisfará a un público amplio, ya que las personas de entre 1,60 y 1,65 m se encontrarán a gusto sobre el italiano. Una vez que llegue a 1,70 m, el bloque motor transversal y la forma del depósito de combustible se encontrarán con sus rodillas. ¡Tendrás que pensar en volver a moverte del sillón!

Relativamente flexible a bajas revoluciones, el bloque transversal de 744 cc del V7 se despierta con gusto una vez que se alcanzan las 5.000 rpm, señala el concesionario de motos ocasión Málaga Crestanevada. A partir de ahí, el viaje se vuelve agradable aunque algunas vibraciones se inviten a bordo. Una vez que ha encontrado su velocidad de crucero, hay poco que la detenga.

Sin embargo, no hay que olvidar que, a pesar de su juventud, la parte ciclo y la selección de las marchas -cinco en número- recuerdan los buenos recuerdos de sus antepasados. Está muy lejos del rigor y la rigidez de las máquinas modernas, pero ¿es eso lo principal? Para apreciar la Moto Guzzi V7 Café Classic en todo su esplendor, tendrás que adoptar un estilo de conducción sano y suave, sin excederte y anticipándote si es necesario. Tanto más cuanto que la frenada proporcionada por el único disco delantero de 320 de diámetro sujeto por una zapata Brembo es muy buena a pesar del uso de latiguillos rígidos trenzados…